Por Rosa
Extracto de la Adoración de fecha: 17/11/2010
Alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar Sea por siempre bendito y alabado a Jesús Sacramentado
Amado Jesús, venimos ante ti, para decirte lo mucho que te amamos, que cada día que pasa nos sentimos más necesitadas de tu amor y misericordia, somos tan pequeñas, tan llenas de debilidades que sin tu sostén nos perderíamos en el laberinto de éste mundo. Por eso Jesús querido te decimos:Ten misericordia de nosotras, venimos Señor en tu presencia para pedirte perdón por las cosas que hicimos y que te ofendieron y también por las que debimos hacer y no lo hicimos.
Silencio
Oración Cerca de Tí
L1: Oh Jesús!! Qué bien se está cerca de ti, Jesús Eucaristía!! Pareciera como si todas las tormentas del espíritu se disiparan y las inquietudes se volvieran humo que se lleva el viento.
L2: Cerca de Ti es comenzar a vivir el gozo del cielo abrir anchurosamente los ojos luminosos del corazón y dejar que nos invada el misterio santo, el gozo inefable de la bendita iluminación.
L3: Cerca de ti, el alma encuentra paz, y el corazón descanso y los anhelos pronta satisfacción. Cerca ti, Jesús Eucaristía!!! Como cambian las cosas de que manera tan diferente contemplamos las creaturas y sus enigmáticos procederes. Cerca de ti, adquieren su verdadera dimensión, su valor e importancia todas las cosas.
L4: Así quiero vivir mi existencia, cerca ti, Jesús Eucaristía. Adorándote, amándote, en una contemplación sin medida, ni ocaso, como será allá en el reino de los cielos.
L5: Cerca de ti, muy cerca de ti, al calor de tu regazo, en el Santuario de tu traspasado corazón, bajo el influjo benéfico del Sacramento.
L6: Cerca de ti, alabando al Padre y amando al Espíritu e intercediendo por toda la iglesia.
¡Qué bien se está cerca de ti, Jesús Eucaristía!!! Amén
Silencio
Hoy estamos aquí Señor para llenarnos de ti, de tu amor y de tu gran misericordia, nos rendimos ante tu omnipotencia y te pedimos que este momento de encuentro contigo se prolongue a lo largo de nuestro caminar por esta vida, y con el corazón lleno de amor te decimos:
Quédate con nosotras Señor, que caminemos según tu santa voluntad y nos transformes en pequeñas Marías que con nuestra humildad, servicialidad y entrega seamos signo de tu presencia y de tu Amor en todos los lugares donde estemos.
Silencio
Gloria al Padre, Gloria al Hijo, Gloria al Espíritu Santo. Como era en un principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén
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